Por: César I. Falla Figueroa (*)
La universidad, es un conjunto
de vivencias sociales, experiencias académicas y de constante reflexión, que
requiere de desafíos que nos permita seguir desarrollándonos como comunidad
estudiantil, que la hagan crecer y que le permita mantener un vigente
protagonismo. Todo ello en el camino de su fortalecimiento institucional. En
esta edición he creído pertinente, compartirles una serie de desafíos que a mi
criterio considero necesarios asumir, para situar a la universidad como una de
las instituciones claves para aspirar a una sociedad con progreso y desarrollo.
Aquí los siguientes desafíos: 1) Lograr que el proceso de enseñanza – aprendizaje
tenga éxito, en cada una de las escuelas profesionales y determinados servicios
académicos que la universidad contemple. Mediante este proceso, podemos tener
una juventud universitaria preparada, participativa y consciente del rol que le
toca desempeñar como profesional, en un futuro.
2) Hacer que cada una de las
vivencias en aula, sean únicas y no sean presas de lo rutinario. La tendencia
es que la enseñanza, sea un compartir de experiencias, tanto para el docente
como para el estudiante, es ahí donde cobra vida, una de las máximas de la
enseñanza universitaria, que es la generación de conocimiento. 3) El proceso
pedagógico, no solo se debe limitar al aula, sino que debe ir a la par, de
visitar “in situ” los espacios donde se ejercen cada una de las carreras
profesionales y esto debe realizarse desde los primeros ciclos, que es la etapa
a mi concepto más interesante. Ello permitirá reafirmar o no, la vocación
profesional de nuestros estudiantes. Por ej.: los futuros ingenieros
industriales tienen que estar en permanente contacto con los procesos
industriales de las empresas de su departamento. Ello los hará profesionales
con las puertas abiertas hacia el éxito.
4) Los planes de estudio
tienen que estar a la par, de lo que requieren las entidades, solo así nuestros
egresados podrán sintonizar con la demanda laboral existente y nuestra
formación académica tendrá un sólido nivel competitivo, en función a lo que el
mundo laboral exige. Para ello la Universidad, tiene que estar vinculada con
las organizaciones y empresas que actúan en el mercado. 5) Buscar que los
estudiantes, propongan con cierta constancia, iniciativas y proyectos a su
comunidad y a la propia universidad, constituyéndose como una motivación, en la
aplicación de lo impartido y perfilándose como agentes de cambio, en cada uno
de los campos en el que está próximo a actuar.
6) Generar en nuestros
estudiantes un alto sentido y compromiso de responsabilidad social, sobre la
base de valores bien cimentados. La Universidad y muy en especial sus
universitarios tienen que estar compenetrados con el desarrollo de su
comunidad, no pueden actuar de espaldas a ella. Su desarrollo, es el desarrollo
de la universidad. 7) La investigación se constituye en uno de los pilares de
este proceso, es uno de los medios fundamentales en la producción de
conocimiento y una de las razones de ser de este bello espacio. Es parte de su
naturaleza y al faltar este componente, estaremos desdibujando el rostro de
estas casas de estudio. Tenemos que ser ambiciosos y ponernos a pensar en que
cada escuela profesional, cuente con un departamento de investigación y
estaremos frente a un hecho concreto de producción de conocimiento.
8) Hay que trabajar en la
actitud del universitario, Tenemos que convertirlo de un ser pasivo a un ser
activo, que constantemente participa. De un ser que problematiza o agoniza en
los problemas a un ser que tiene la capacidad de proponer alternativas de
solución y de alguna manera interviene en ese proceso. De un ser que vive solo
el presente, sin mayores preocupaciones, a un ser que le añade responsabilidad
a ese presente y que es capaz de proyectarse al futuro, con una idea clara de
lo que quiere conseguir y con la debida responsabilidad en cada uno de sus
actos. 9) Alcanzar un nivel de reflexión por parte de los estudiantes, para
ello se requiere un trabajo planificado, en cuanto a trasmisión de
conocimiento, nivel de lectura, el constante análisis de casos prácticos y la
aplicación del conocimiento recibido.
10) En nuestra comunidad
universitaria, tenemos que ser conscientes que todo lo aprendido, no debe
quedar entre cuatro paredes o en el campus de nuestra universidad, sino debemos
darlo a conocer, a través por ejemplo de
publicaciones escritas, como: textos, libros, periódicos y revistas. Así como en
espacios virtuales, como por ej.: páginas web, blogs, foros de discusión,
páginas de Facebook (con afán ilustrativo), etc. Ello le dará dinamismo,
vitalidad, cercanía y prestigio al centro de estudios. 11) Los directores de
las escuelas profesionales y de determinados servicios académicos, tienen que
estar en permanente acercamiento con nuestros jóvenes; recogiendo sus
impresiones, sus demandas, sus inquietudes, sus propuestas, sus quejas,
posibilitando un clima de armonía y que ello favorezca el proceso de enseñanza.
Recuerden que son ustedes, sus referentes en cada una de sus carreras. 12) La
Universidad tiene que ser uno de los principales promotores y difusores de la
cultura en cada uno de los territorios donde está presente. La cultura
constituye el alma de un pueblo y es al pueblo, al que se debe la universidad.
Espero que estos desafíos a emprender, hayan servido a quienes tienen al frente
los destinos de las universidades. El destino de la Universidad y de nuestro
país, está en nuestras manos.
* Licenciado en
Ciencias de la Comunicación
www.cesarfalla.com
No comments:
Post a Comment