Por: César I. Falla Figueroa*
Hace mucho que los peruanos,
no vivíamos este hermoso momento en Copa Libertadores de América. La actuación
de Real Garcilaso en la presente edición del certamen internacional, ha puesto al
Perú entre los ocho mejores del continente. Gesta que a mi generación, nos
recuerda a lo hecho por Cienciano, si bien es cierto en un torneo de otras
características; pero de muy similar relevancia en su protagonismo deportivo,
junto a la grandiosa campaña de Sporting Cristal que conquistará el Sub
Campeonato de esta copa, allá por el año 1997.
Está claro que en este éxito
nacional, mucho tiene que ver la mano del profesor Freddy García Loayza, más
conocido en el ámbito futbolístico como “Petróleo” García, director técnico y mecánico
de profesión; quien lo llevará a primera división al club celeste, sacándolo
campeón en Copa Perú en el 2011 y alcanzando, de forma memorable el segundo
lugar en el campeonato descentralizado del 2012 y ahora, contra todo pronóstico,
algo cerca de alcanzar la máxima cumbre de la presente edición sudamericana.
Su personalidad, capacidad,
ejemplo y valores transmitidos a sus jugadores, ha tenido mucho que ver en el
accionar de sus dirigidos en la presente lid copera. García, es quien le imprime
carácter, mística, disciplina y quien les genera a sus pupilos ese orgullo por
vestir la seda garcilasina y romperse el alma por sus colores, en cada
encuentro. De no haber sido por estas valiosos atributos; el conjunto sureño no
hubiera podido gestar históricas jornadas, que hoy es orgullo de su hinchada,
del Cuzco y de todo nuestro país.
Lo hecho por el club, que
lleva el nombre de aquel notable escritor cuzqueño, el Inca Garcilaso de la
Vega; considerado el “primer mestizo biológico y espiritual de América” y autor
de una de las obras símbolos de las letras peruanas “Los Comentarios Reales de
los Incas”, marca un avance muy significativo para el futbol peruano y nos da
una clara señal que revertir la realidad del balompié nacional, es posible y
que con autoridad, objetivos claros a corto, mediano y largo plazo y con mucho
trabajo, se pueden lograr grandes cosas.
La presencia de los
paraguayos: Rolando Bogado, Víctor Ferreyra, Oscar Gamarra y con un tiempo de
permanencia mayor Fabio Ramos; ha fortalecido a la escuadra incaica por lo
demostrado en cada una de las actuaciones de dichos extranjeros, sumada a la de
los argentinos Alfredo Ramúa y Diego Carranza; habla muy bien del criterio
tenido por los directivos de la joven institución, al contratar a estos
profesionales que solo le dan al plantel; mayor jerarquía, una mejor dinámica
de juego y en especial un mayor poder ofensivo.
Cabe subrayar el desempeño
de nuestros compatriotas, Yosiro Salazar, Jhoel Herrera, Edwin Retamoso,
Christian Vildoso y Mauricio Montes; que gracias a su esfuerzo y talento, se
han sabido ganar un merecido lugar en el cuadro imperial.
Garcilaso, parece haberse
reencarnado en ese equipo escarlata (Cienciano) que nos hizo llorar de alegría
hace una década, tras obtener la Copa Sudamericana; con heroicas presentaciones
ante escuadras de gran trascendencia internacional como Universidad Católica
(Chile), Santos (Brasil), Atlético Nacional de Medellín (Colombia), River Plate
(Argentina) y logrando la Recopa Sudamericana; al derrotar, nada menos que a un
gigante de América como Boca Juniors (Argentina), resultado que le significaría
a la postre alcanzar la Recopa Sudamericana; cerrando la época dorada de la
entidad nacida del Colegio de Ciencias y Artes de la ciudad, considerada
“ombligo del mundo”.
Club centenario cuya afición
hiciera del “Sí se puede” un himno de fe, esperanza y optimismo para todos los
peruanos y que hoy sirva de aliento y grito de batalla para los once muchachos
que por situaciones del destino, les tocará estar presentes en esta cita con la
historia, esperando con mucha expectativa salir airosos ante el complicado
conjunto santafesino.
Nuestra gente, hoy se sigue
pintando de celeste y este equipo reaviva aquel cantar triunfal de los
cuzqueños y de todo el pueblo peruano; “El Upa upa upapá”, pues ahora el Papá
es el club Garcilaso del Cuzco y estoy seguro que esta legendaria y querida
rumbita se hará escuchar en la ciudad imperial, como también en tierras
colombianas cuando nos midamos con Independiente Santa Fe (que será nuestro
rival en cuartos), como vitamina primordial para hacer realidad el sueño de
estar en semifinales de un evento de tan importante magnitud.
Los partidos jugados frente
al propio Independiente Santa Fe, el copero Cerro Porteño de Paraguay y Deportes
Tolima de Colombia en fase de grupos y ante el decano del fútbol uruguayo,
Nacional; nos permite tener confianza en lo que será capaz de hacer este
sorprendente y ya querido club, en este nivel de competición.
Lo mostrado por el cuadro
imperial en nuestra primera división y en la máxima competencia de clubes de
América Latina; refleja el compromiso y la seriedad de sus dirigentes; en la
planificación de cada campaña que afronta, está demás decir de su propio cuerpo
técnico y de su plantilla de jugadores; quienes han sabido llevar bien en alto
el nombre del Perú y estar a la altura de esta enorme responsabilidad y
tremendo desafío. Acción que los hace dignos de admiración y de nuestra
completa gratitud.
*Licenciado en
Ciencias de la Comunicación
Email: cfallafigueroa@hotmail.com
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