Por:
César I. Falla Figueroa*
Recuerdo cuando mi madre muy
de niño, me decía: “antes de comer, lávate las manos”, claro que esa frase iba
para todo lo que implica ese acto de higiene. ¡Como recuerdo esas palabras!, que
se insertaron de manera muy temprana como parte de mis más sagrados hábitos. En
medio de esta pandemia, nunca antes resultó tan importante lavarse las manos,
en la batalla que libramos para vencer a un enemigo global como es el
Coronavirus, jamás pensé que este acto iba ser tan determinante por estos
tiempos. Hay algo que rescato siempre en el Presidente Vizcarra, con cierta
constancia recomienda esta actividad, aseverando que de esa manera matamos el
virus, que tan importante es que lo diga un Jefe de Estado.
¿Tenían conocimiento que esta
sencilla actividad, elimina hasta un 80% de los microbios causantes de diversas
enfermedades? Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), el lavado de
manos disminuye de manera apreciable el contagio de enfermedades diarreicas y
en un 25% las infecciones de carácter respiratorio. Como ya se ha señalado por
los entendidos en la materia, debido a que el ser humano está en contacto con
superficies contaminadas, las manos transportan virus, bacterias, hongos o
parásitos que generan múltiples enfermedades. Por tanto el lavado de manos, se
constituye en uno de los hábitos capitales en el diario vivir del ser humano.
En este aporte periodístico,
creo conveniente compartirles la manera correcta como efectuar el lavado de
manos: Frotándose hasta producir espuma, incluyendo las palmas, el dorso, entre
los dedos y debajo de las uñas, por lo menos 20 segundos, posterior a ello se
enjuaga con abundante agua a chorro. Para esta actividad se necesita lo
siguiente: jabón líquido o en barra, agua para consumo humano, papel desechable
o tela limpia para el secado. Asimismo, se recomienda cerrar el caño con el
material usado para secar las manos.
El lavado de manos, es
constante. Antes y después de ingerir alimento y de manipular los mismos,
claro, también se realiza cuando estén sucias obviamente. Así como después de
atender personas enfermas y tras manipular animales. Si se carece de agua y
jabón, los especialistas indican usar un desinfectante de manos a base de
alcohol que contenga como mínimo 60% de este elemento.
Amigos, tenemos entre
nosotros un enemigo terrible que requiere de nosotros mucho cuidado y el lavado
de manos, es de esas tareas claves para vencer a este virus, es la primera
línea de defensa contra la propagación de muchas enfermedades, desde un
resfriado hasta enfermedades más graves como la meningitis, bronquitis, gripe,
hepatitis A y muchos tipos de diarrea. Internalicemos su ejercicio y hagámoslo
realmente nuestro por nosotros, por nuestros hijos y por las próximas
generaciones. Ellos, nos van a agradecer.
Si los pequeños de la casa entran
en contacto con gérmenes, más aun ahora que el gobierno ha declarado su salida
unas horas en varios distritos de Lima, es posible que se infecten al tocarse
los ojos, la nariz o la boca. El riesgo es que los niños se conviertan en
transmisores del virus, a cada uno de los miembros de sus familias.
En el ámbito de la salud,
son múltiples los aspectos y medidas para la prevención de las infecciones,
siendo una de las más importantes la higiene de las manos. Una medida sencilla,
eficaz y al alcance de todos. Tenemos que ser conscientes que la técnica del
lavado de manos es una de las formas de prevenir las enfermedades trasmisibles.
Hoy, se pone mucho énfasis en este tema, debido a la situación higiénica,
epidemiológica y de pandemia que se vive a nivel del orbe. Esta “famosa”
actividad se ha constituido en algo fácil de hablar pero muchas veces difícil
de realizar.
Según los expertos en salud,
la higiene de las manos es lo sustancial para el autocuidado, que cualquier
persona puede hacer para prevenir una infección que podría causar daño y hasta
derivar a la muerte, como es lo que genera el Coronavirus. La OMS expone seis
maneras importantes para que los centros de salud puedan mejorar la higiene de
las manos y frenar la propagación de este tipo de enfermedades.
Aquí cada una de ellas:
Aquí cada una de ellas:
-
Utilización de desinfectantes para las manos.
Utilización de desinfectantes para las manos.
- Disponibilidad de agua, jabón y toallas
desechables.
- Capacitación y Educación del personal sobre
la forma de proceder correctamente.
- Observación de las prácticas del personal y
retroalimentación sobre el desempeño.
- Uso de recordatorios en el lugar del trabajo.
La presente reflexión es una
recomendación principalmente para mis queridos niños, los que me conocen saben
de mi compromiso con ellos; que nació desde mi labor como comunicador social
pero más aún, mi sensibilidad a los niños se afianzó como docente de Oratoria.
Pero, sin duda, este artículo es un aporte para la familia peruana.
*Licenciado
en Ciencias de la Comunicación
Magister en Ciencias de la Educación
www.cesarfalla.com
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