El cambio hacia una Gestión por Resultados

Por: César Falla Figueroa*

Hace un tiempo recibí la invitación de un amigo periodista para participar de un evento organizado por una prestigiosa universidad local, el tema fue “Gestión por Resultados”. Confieso que desde el título llamó poderosamente mi atención, sentí una conexión natural con el tema porque sé que es uno de los puntos centrales de las gestiones gubernamentales actuales y de toda organización. En su búsqueda por crecer, desarrollarse y marcar sus pasos de manera sostenible.

El proyecto se denominó “Fortalecimiento de las capacidades de Gestión por Resultados” financiado por la Unión Europea, que fue implementado entre los años 2009 y 2011 en las regiones de Arequipa, Cusco, Piura y Lambayeque, con auspiciosos logros.

El propósito fue generar procesos que busquen dar alternativas de solución a problemas de la gestión pública que atañen a todo el aparato del Estado. Aquí podemos precisar dos aspectos bien definidos: la gestión de las políticas públicas partiendo de una planificación estratégica que involucre a múltiples sectores, orientados a un resultado que garantice la calidad de vida de todos los ciudadanos. Así como, la tarea de generar consensos regionales, a partir del intercambio de experiencias logrando consolidar los proyectos de desarrollo de las zonas.

Este proceso tuvo como objetivos: Mejorar la capacidad de planeamiento y gestión basada en resultados, empoderar a la sociedad civil a fin de que realice la vigilancia de la gestión regional y promover el fortalecimiento de espacios de consenso entre agentes del gobierno regional, academia y sociedad civil. Todo ello traducido en la mejora de la eficiencia del gasto público centralizando su medición, en los resultados obtenidos.

Esta importante iniciativa encierra una serie de actividades, como la elaboración de líneas de base (primera medición de los indicadores contemplados en el diseño de un proyecto social) regionales, sobre las políticas que se priorizan, el diseño e implementación de talleres para organizaciones de la sociedad civil y a periodistas; con el ánimo de facilitar las estrategias y herramientas para el seguimiento y vigilancia de la gestión pública regional.

Para nadie es un secreto que en el Perú, como en otros países del continente, la inversión pública carece de un impacto significativo en el bienestar de la población y es también percibida por un sector considerable como un gasto sin sentido o como vergonzoso colchón de campañas políticas.

Es más que notorio, como la administración pública en nuestro país se ha ido conduciendo; siendo percibida por el común de los ciudadanos como lenta, ineficaz, hasta cierto punto mediocre y de espaldas a las demandas ciudadanas.

Es evidente que la falta de planificación y la imperdonable deficiencia en la gestión de implementación y ejecución de proyectos, son dos cánceres que tenemos que eliminar de nuestra gestión pública.

Es allí donde calza perfectamente, la iniciativa de implementar una cultura de  gestión pública por resultados, que dinamice el trabajo y nos dé un sendero de lo que queremos como peruanos.

Es para mí un motivo de orgullo que este proyecto, haya sido materia de capacitación para un número importante de periodistas en dos áreas fundamentales que tienen que ir de la mano: gestión por resultados y vigilancia ciudadana.

Hay que ser hidalgos en reconocer y aplaudir que este enorme esfuerzo, forma parte del avance de la Reforma del Estado que compromete cambios estructurales en entidades claves del país, como: SUNAT, CONASEV, SBS, OSINERG, OSIPTEL, entre otras. Se suma a esta mejora, el hecho que el MEF haya enrumbado su trabajo desde el 2007, hacia un presupuesto sustentado en resultados. Titánica tarea que hoy todos los que queremos al Perú, saludamos y esperemos que se mantenga y alimente con el tiempo.

Cabe indicar que el Presupuesto por resultados es un requisito por ley en la formulación del presupuesto público, condición que garantiza su aplicación.

Como es lógico, este proceso seguirá en avanzada y en esa medida, las universidades y las propias entidades del Estado; deben aperturar un constante diálogo entorno a las necesidades prioritarias de Chiclayo y de todo el departamento de Lambayeque. Así como la responsabilidad de las organizaciones para hacer seguimiento a la administración pública para que se efectúe lo estipulado.

Exhorto, a las autoridades regionales y locales de nuestro departamento a acoger este sistema de trabajo en sus respectivas espacios, y visualizar en el futuro un Lambayeque con mejor calidad de vida, atendida en sus principales necesidades y comprometida con su desarrollo.

En las conversaciones que sostengo con colegas, profesionales en la materia y ciudadanos de a pie; llegamos a la conclusión que este valioso aporte, significa un instrumento para los gobiernos a fin de orientar su gasto a objetivos estratégicos de corto, mediano y largo plazo; y no reducida a una justificación de gasto, muchas veces sin la más mínima coherencia y sin la trascendencia debida. Esto sin duda le daría al Perú una visión sostenible de lo que realmente queremos conseguir de cara al futuro.

Una de las reflexiones que me deja esta gestión por resultados, es que tenemos que tratar al ciudadano como cliente que merece un buen servicio y que tiene que ser atendido en las mejores condiciones.

Luego del evento y de posteriores invitaciones, respecto al tema en mención, sólo me queda agradecer a la Universidad Santo Toribio de Mogrovejo y al Lic. Alejandro Chanduví, docente, gran profesional y amigo personal, quien tuvo la gentileza de invitarme a tan importante actividad.

*Licenciado en Ciencias de la Comunicación

  Email: cfallafigueroa@hotmail.com